Mi último destino militar, y ya en la Reserva, fue la de Delegado de Cría Caballar en Castilla la Mancha con mi despacho en Toledo. En aquel momento la capa de un caballo PRE era casi la que marcaba el precio del caballo, mucho más que su conformación física o aptitudes, por lo que decidí enterarme de como se transmitían los colores de las capas, y llegué a escribir algún artículo come este en la revista de Cría Caballar ECOS DE MORATALLA Nº5 del 2006.
Si hay interés en algún detalle, pinchando en cada fotograma se lee fácilmente.
José V. Ruiz de Eguílaz y Mondría