Quantcast
Channel: EL CLUB DE LOS POETAS MUERTOS. JINETES
Viewing all articles
Browse latest Browse all 1469

ECOS DEL DEL 5º DEPOSITO DE SEMENTALES

$
0
0















ECOS DEL
DEL 5º DEPOSITO DE SEMENTALES
 Y DEL
 CENTRO DE REPRODUCCION EQUINA DE ZARAGOZA




Dedicado a todos los Jefes y Oficiales destinados en esas Unidades que estuvieron bajo mi mando en aquellos años, y de manera especial a los especialistas ya que  sin ellos nada de esto hubiera podido realizarse.

También con “todo cariño” va dirigido a los Jefes actuales de algunas Unidades del Servicio que han cerrado las puertas de los establecimientos a toda clase de visitas, tanto civiles como militares, y que han prohibido de manera tajante reuniones o comidas de hermandad  de sus miembros para evitar fomentar los lazos del compañerismo, amistad y espíritu de cuerpo que siempre se deben cuidar y mantener en nuestro Ejército.

Y es que como dijo Churchill, “La política hace extraños compañeros de cama”. Yo lo hago extensivo a los gerentes, directores y tecnócratas que hoy día abundan en nuestro Ministerio, deshaciendo Unidades, campando a sus anchas, y dañando a nuestra gran familia.  

Os mando unas fotos donde podéis ver el estado en que dejamos el Centro. Hoy no sabemos cómo está, o tal vez les da vergüenza enseñarlo. Seguramente porque no saben lo que tienen en sus manos.





Ecos que me recuerdan lo dicho durante los siete irrepetibles años (1989-1996), que estuve al mando de esas dos Unidades donde siempre tuvimos a gala, independientemente del motivo, hablar sólo de caballos, y que hoy resumo en puntuales actos que creo dan una visión más o menos exacta de ese Centro.
  Empiezo con la “Presentación y saludo” palabras con las que recibía a los muchos que nos visitaban.
  Referente a nuestra vida interna y privada, solo unos apuntes sobre las dos comidas tradicionales del mismo: Paradas y Navidad, donde aprovechaba para seguir formando  a mis especialistas.
  De todas las visitas, solo cito dos, la de nuestro entrañable General García Benavides y la de un General de Caballería argentino
  Y para terminar, las palabras de mi despedida como resumen de una vida a caballo, y es que el tiempo pasaba y yo iba cumpliendo primaveras.



             

  “PRESENTACION Y SALUDO”
 
  Eran Unidades en las que, dirigidos y manejados por personal técnico cualificado, se estabulaban, se preparaban y entrenaban a los Sementales del Estado, desarrollando sus aptitudes y proporcionándoles la adecuada alimentación para conseguir las condiciones idóneas físico-sanitarias. Todo ello con la finalidad de ponerlos a disposición de los criadores y ganaderos de su zona de responsabilidad. La nuestra comprendía: Aragón, Navarra, La Rioja, Cataluña, Valencia y Baleares.
  Siempre tuvimos a gala el hablar mucho de caballos, y  quisiera seguir con la costumbre, aun a consta de olvidar lo que hoy quiero recordar, como eco de lo dicho en aquellos años. Y a modo de introducción empezaré como siempre, con las palabras que servían de presentación y saludo a todas las visitas, actos internos, cursos, presentaciones etc.
      .. Donde hoy están, solo se habla de caballos, es decir, de cosas vivas y concretas que huelen a campo y sol, donde no se comprende el “absentismo” (1), fenómeno social que como saben, trata de la fuga del campo a la ciudad.          Al contrario, nosotros  procuramos ir de lo abstracto a lo concreto y por eso nos planteamos el tema vivo campero, soleado y nervioso que es el caballo.
¡Sí!, el caballo, lo que todavía hoy mantiene el nombre de nuestra querida España en el corazón de Europa, en el picadero de la Joseph-Place de Viena; con la Escuela Española de Equitación. ¡Sí!, lo que cada día más nos requieren desde todo el mundo, nuestros sementales árabes y españoles, ya saben con el fin de refrescar sangres y asegurar anatomías.
  La crisis, que asusta a cuantos amamos a esta fina heráldica parcela de la crianza equina, es un producto lógico de la técnica maquinista en que vivimos, pero la vida animal es muy “terca” y se reserva siempre una baza final para burlarse de esa técnica.
  Lo que está muy claro es que el caballo es una decantación de logros estéticos y filtraciones históricas y, como tantas otras cosas, empezó como recurso de utilidad. Hoy se ha convertido en elemento para el deporte y el ocio. En Francia, Inglaterra, Holanda y Alemania bien lo han entendido.
  Resumiendo, se puede decir que las sangres más egregias en la Cría Caballar, son todas sangres imperiales de pueblos que galoparon sobre el planeta: ingleses, árabes y españoles, donde Inglaterra puso la velocidad, Arabia la belleza, y España  como en tantas otras cosas, España lo suyo: solidez, fuerza y valor. Aquí también la misión de España es típicamente representativa, como lo es en las “Domas”– intervención de la inteligencia y voluntad humana, que desde la montura acaba influyendo sobre la anatomía del semoviente – Así; En Viena es casi “ballet” lo que en un cortijo andaluz es “faena”.En Lisboa, frente al toro, es casi “juego circense” lo que en Madrid es “pelea” y “duelo”.
    De muchos de ellos tenemos sangres, pero en el fondo de todos está el ingrediente árabe que les proporciona un equilibrio perfecto y una gran belleza. Son el O-O-O, el centro geométrico del Trígamo Signaléptico de Barón (2): la perfección.
  Lo del español, a pie y a caballo, es arriesgar, comprometerse, eludiendo defensas y ventajas. Comentaba Pemán, que por eso popularmente se reserva la denominación exótica para todo lo que es hacer las cosas a medias o aliviándose. Así convidar “a la inglesa”, pagando a escote, no es convidar. Despedirse “a la francesa” no es despedirse, pero podéis creerme, aquí sí vivimos el caballo y, siguiendo con el símil, diría que trotamos a la española haciendo con él un bloque perfecto sin introducir en el esfuerzo, el alivio o trampilla que significa el tiempo en suspensión del británico aire.
  Como se ve, hay demasiada decantación histórica y estética en nuestra Cría Caballar para que se nos tache sólo como una partida simplemente utilitaria o económica de los presupuestos, que se nos ignore dentro del mismo Ejército, o lo que es peor, que se nos olvide o se nos quiera suprimir.






“COMIDAS”

  Que no eran más que un pretexto  o vehículo para enhebrar los sentimientos. Lo de menos lo que comíamos o bebíamos, lo importante la unión entre  todos los miembros de la plantilla de la Unidad , aunque algunos tuvieran los ojos cerrados a estas realidades y no supieran distinguir la sustancia del accidente.



“SALIDA  DE PARADAS”

Como siempre les decía, también hoy os hablaré de caballos pero por una sola vez a vosotros me dirigiré como militares y especialistas que sois, permitiéndome mezclar con los caballos las que en mi opinión deben ser las dos primeras virtudes militares que os adornen: me estoy refiriendo a la fidelidad y a la lealtad.
  De la “fidelidad”: fe que uno debe a otro, vector de una dirección y un sentido, con un solo objetivo. Si hay Arma combatiente en el Ejército, que la posea en grado sumo esta es la Infantería, y su himno nos lo recuerda: la fiel Infantería que por saber morir sabrá vencer…, en sus muchas misiones siempre al final prevalece la ofensiva, el ataque… lo dicho, una sola dirección.
De la “lealtad”: cosa de dos, vector de una dirección, pero con dos sentidos: ascendente y descendente, lealtad que obliga al subordinado con el superior y a la inversa. La Caballería en grado máximo la posee y ese doble sentido también se refleja en una de sus misiones: protección de la retirada, en donde tantos días de gloria se alcanzaron, vector de dos sentidos, fuerzas propias y enemigas, llegando hasta el sacrificio para proteger la retirada de los nuestros….
  Estudiosos de las razas animales consideran al perro como al más fiel de todos, pero también se ponen de acuerdo al afirmar que el caballo es el más leal y esta lealtad que en sí tiene, se transmite al que a su lado está y al que lo monta, reflejándose en la forma de ser de aquellos y en la práctica del deporte de estos, en la equitación.
Si el contacto con el caballo y la práctica de la equitación son la base del “Espíritu Jinete”, creo sinceramente que todos lleváis muy dentro ese espíritu, y con esa garantía, solo os recomiendo lo que dice nuestras Ordenanzas y que no es otra cosa que el no limitarse a hacer lo preciso de vuestra obligación. Y la mejor forma de lograrlo, es por medio de esa lealtad descrita, lealtad en vuestra forma de vida, en vuestro trabajo, hasta lealtad en vuestra equitación.
 En efecto, cuando todos los sentimientos, impulsos y vibraciones que el caballo emite (rama ascendente), son interpretados por el jinete; cuando todas las ayudas ya sean naturales o artificiales, impulsoras o de retención que el jinete manda, son bien admitidas por el caballo (rama descendente), entonces se puede decir, que en el tan traído y llevado binomio “caballo - jinete” hay lealtad. Y cuando esto ocurre, cuando la equitación es limpia y sin trampa, en una palabra; cuando en ella hay lealtad, se produce algo maravilloso y es que la equitación se transforma en arte.
Esta lealtad es la que militar y deportivamente se exige en este Centro y esta lealtad es la que debéis exigir y exigiros siempre. Más que carnaval que antecede a la cuaresma, esto es comida de hermandad para desearos lo mejor en esta ya comenzada temporada de monta (3).



“DE NAVIDAD”.

También debe ser jornada de reflexión sobre lo realizado durante el año que por el cronómetro de salida se nos va… Habéis hecho mucho y bien y conviene recordarlo, no como recreo a vuestros oídos sino como elogio y barras para superar en el difícil oxer que el futuro nos depara… y como siempre, que esta comida también sirva para estrechar el compañerismo y la amistad
Pero en esta Navidad, no haré el balance ya anunciado con fechas y sucesos, sino que trataré de resumirlo en dos puntos: uno, producto de mi observación; el otro de comentarios de algunas de las muchas visitas que durante el recorrido del año tuvimos.
El primero, y que cada día más me satisface, se refiere a la Unidad como conjunto, concretamente a la total integración de todos sus miembros. Cada día oigo hablar menos de los Depósitos de Bétera, Hospitalet y Manacor. Vosotros y vuestras familias con gran sacrificio lo hicisteis posible. Insisto, gran sacrificio, pues sé lo mucho que allí dejasteis y aunque no lo comentéis, aquellos lugares siempre ocuparon sitio importante en vuestros corazones. Para que vuestra llegada aquí hay podido ser la mejor posible, también colaboraron los que aquí estaban con su compañerismo y hospitalidad, no lo olvidéis.
 El resultado de todo esto, nos llegaba al acabar la temporada de monta de ese primer año con la nueva y gran área de responsabilidad a nuestras espaldas. De Valencia, Cataluña y Baleares a veces nos llegaron alabanzas (4), quejas pocas, y así vimos alcanzar el objetivo que nos fijamos en su día y que no era otro que prestar, al menos, igual servicio que en años anteriores.
 El segundo punto, resumen del año como os decía, lo he sacado de comentarios de algunas de las muchas visitas que tuvimos, aunque se que no fueron dichos con mala fe. Se referían en sus alabanzas al Centro y las relacionaban únicamente con el gran número de obras que en él se había hecho.
Podéis creerme, es el peor piropo que nos podían echar.
¿De que sirven las instalaciones si en ellas no se modernizan las técnicas de reproducción? ¿Para que tener bien alojados los caballos, si no se montan, ni se trabajan ni se atalajan ni se enganchan? ¿Para que las aulas si nada en ellas se enseña?
No hay dinero en el mundo para comprar hombres con ilusión, con ganas de trabajar, técnicamente preparados, con afición al ganado y unidos por el compañerismo.
… Napoleón comentaba que “No se paga el valor con dinero” y, en cuanto a trabajos que el soldado pudiera efectuar que,… “No serían asalariados ni podrían serlo nunca, es deshonrarlos, ya que solo por honor, el militar, ciertos trabajos haría”.
Lo que de verdad colma la felicidad de un Jefe es tener la calidad humana en su plantilla, como la que yo tuve y no el mucho o poco dinero empleado en obras para su Unidad.
Desde nuestra “interior satisfacción” ¡Feliz Navidad!, y todo lo mejor para vosotros y vuestras familias en este nuevo año que ya preparado está, a la entrada a de la pista.
                … Y siempre a los postres, la plegaria que los criadores de caballos de todo el mundo, hacen a su patrón “San Jorge de Capadocia”, y con esta plegaria como brindis acababa todas las comidas:
“Jorge, santo caballero, tú que desde el cielo bendices a los sementales y a las yeguas de vientre, acude con tu favor a nuestros corazones ansiosos y acoge nuestras plegarias. Gran santo, míranos, ve nuestras penas, las mejores yeguas esperan descendencia y todos, gran santo esperamos la liberación: ellas de sus potros y nosotros de nuestras preocupaciones”.
Por favor llenar vuestras copas y brindar conmigo.
   Para ese brindis yo preferí siempre la copa de champaña tradicional, la francesa de boca ancha y baja, que dicen es la medida de un “pecho” de Mª Antonieta, y no las de ahora, esas muy modernas altas llamadas de flauta, que mas bien parecen la medida de la “pi...” de Napoleón.



Funcional y muy empleado. En él se organizaron varios concursos de saltos y servía de pista de ensayo cuando se utilizaba la pista verde exterior.



“VISITAS”

DEL GENERAL JEFE DE LA BRIGADA DE CABALLERIA CASTILLEJOS II

        Si a la admiración y respeto que a todos os tenemos, añado la particular hacia muchos de vosotros, consecuencia de los años de amistad, y hacia vuestro General, como profesor mío que fue en la Escuela Militar de Equitación. Os puedo asegurar que hoy es un día muy señalado para este Centro y para mi (4).
  A nuestro General le recordé que para nosotros era fundamental seleccionar progenitores con aptitud al salto, cualidad que algunos expertos dicen es aprendida y para otros heredada, opinión esta segunda a la que yo personalmente me sumo.
  “De casta le viene al galgo”. Sábado 12 de agosto de 1928 – IX Olimpiada – Ámsterdam.
Salto de Obstáculos. Prueba por equipos (Participaron 16 naciones).
Medalla de oro: España. El equipo estaba formado por tres jinetes militares, los tres profesores de la Escuela de Equitación Militar de Madrid:
Capitán Marques de los Trujillos con “Zalamero”
Capitán D. José Navarro Morenes con “Zapatazo”
Y tu padre mi General, el entonces Capitán D. Julio García Fernández sobre “Revistada”.
Mi General, hablando como siempre de caballos me viene el recuerdo de algunos de los tuyos y me aparecen los nombres de “Vilaya”, “Lomeño”, “Panzas”, “Don Manuel”… y, sobre todos, el de “Carmín”; y no precisamente por la materia de color rojo encendido que se obtiene primero de la cochinilla y se reduce a fórmula en el siglo XVII, sino al nacional, castaño, castrado de la Yeguada Alcañices (Duque Alburquerque), por “Theraskid” P.S.I. y “Cacerola” P.R.E.
  Con “Theraskid” padre de “Carmín”, el primer día de la Temporada de Primavera del año 1956 en el hipódromo de la Zarzuela, el Duque ganó la carrera de vallas premio “Manteau de Caeur” en su debut. (Se lo compró a Nicolás Bidle).Ese año, en la carrera del Gran Premio de vallas de Gentleman puntuable para el campeonato del mundo, el Duque no pudo correr debido a un grave accidente de automóvil sufrido días antes, pero sus colores sí estuvieron representados en la citada carrera, Premio “Ponce de León”. Alburquerque ofreció la monta del padre de tu  “Carmin” al Coronel ingles Peter Towsend, conocido jinete amateur cuyo nombre aparecía reiteradamente en la prensa del corazón, orlado por la leyenda posible de un amor real imposible.
    En final apretado, tres caballos pasaron la meta tan juntos que hubo que recurrir a la fotografía. Ganó “Aurrerá” por corta cabeza, montado por el italiano Speroni; el Coronel Towsend con “Theraskid” quedó colocado.
  Mi General, como en los tiempos en que la emoción taurina venía menos dictada por el arte del toreo que por la lucha del astado, con el entonces caballo sin peto del picador, grito como se gritaba en los tendidos: ¡Más caballos!
  Comparativamente hablando, si con ello estrechamos aún más los lazos del compañerismo, si  alimentamos nuestro espíritu jinete y si mejoramos nuestra a veces dañada moral…, repito “¡Más caballos!



Hasta trajimos de Córdoba a Juan Robles para organizarlos y ponerlos en marcha.


DEL GENERAL JEFE DE LA 1ª BRIGADA DE CABALLERIA DEL EJÉRCITO ARGENTINO.

 Y así le recibí:
  Sabemos que el poema de José Fernández “Martín Fierro”, publicado en Buenos Aires en 1872, es pura ficción, pero también sabemos que sus características son profundamente reales y que reflejan con exactitud la sicología de los hombres del campo argentino, ya sean paisanos o gauchos.            Estos últimos, sin conocerlos creemos que, a la vez que por grandes jinetes, se distinguen por su amor a la libertad, falta de ambiciones, generosidad, hospitalidad y nomadismo. El gaucho, debe de ser el caballero andante de la Pampa.
    A mi también me gustaría para montar, usar como esos gauchos el amplio chiripa de bayeta, calzar botas de potro con grandes espuelas de plata y como únicas armas llevar el cuchillo, junto a la plata, el lazo y las boleadoras. En los ratos de ocio, jugar con ellos al “Pato”o participar en una carrera de “Sortijas”, y por encima de todo, un domingo cualquiera, tomar parte en una improvisada “Jineteada”, para ver los segundos que sobre el caballo pudiera mantenerme, al soltarlo del poste y quitarle la venda de los ojos.
  Aquí con tantos caballos, lo que no tenemos es el “Falabella”, el pony más pequeño del mundo obtenido por la familia Falabella en el rancho de “Recreo de Roca”, cerca de Buenos Aires, mediante una cuidada selección de ponéis Setthland y el P.S.I., pero los que hay, y buenos, son los P.R.E.,s. descendientes de las líneas que dieron origen a vuestro querido Criollo, y debido a su gran resistencia, su poca talla y sus capas oscuras, lograron sobrevivir en la Pampa. Siempre fue el caballo del gaucho.
De vuestro caballo argentino desciende el Criollo chileno, en Colombia recibe el nombre de Guajiro, en Venezuela Llanero, en Perú Saltero, y en Brasil, Criollo de Río Grande del Sur.
En la actualidad, es más que probable que el gaucho duerma en buena cama y no al aire libre con su montura como almohada. Pero el gaucho existirá siempre, aunque no cabalgue todo el año persiguiendo al ganado salvaje y aunque su vida sea más sedentaria, su orgullo y habilidad como jinetes nunca desaparecerán, como nunca desaparecerá  nuestra simpatía hacia todos ustedes.



“DESPEDIDA”

  Era más que probable que esa fuese la última ocasión que, de manera oficial, tuviese a toda la plantilla reunida y no quise dejarla pasar, así que aproveché la ocasión para dirigirles estas palabras a modo de despedida y que como siempre con el caballo estuvieron relacionadas.
  Me vais a permitir, les decía, que hoy empiece recordando a los que me enseñaron a colocar los pies sobre los estribos, a coger las riendas con las manos y a sentarme sobre el dorso de un caballo. A los que, cuando por primera vez me caí, muy en serio me dijeron: ¡No te preocupes!, quien no se cae, es el obispo que se sienta sobre un sillón de terciopelo.
  Hoy quiero recordar a todos y sobre todo a mi padre, porque enseñándome a montar me enseñaba a vivir.
   Cuando por las noches me ponía a escribir en casa, a veces paraba y me creía que estaba montando a caballo. Otras veces, por las mañanas en el picadero, hacía media parada y pensaba que estaba escribiendo… Así pasaron los pocos días que me quedaban de mi vida militar activa y, al pensarlo, sentía que la boca se me resecaba y cómo el corazón se me arrancaba a galopar. Sentía lo que siente el jinete cuando monta por primera vez su potro, lo que siente el garrochista en el rodeo a la espera de que le hagan “seña”,lo que el caballero cuando sitúa su caballo torero frente a la oscuridad del chiquero, o lo que un jinete de saltos, preparado o prevenido, en la pista de ensayo con “gato” de ganar.
   Vuestro trabajo, bien lo sabéis les decía, debe ser como el que se lleva a cabo en una ganadería, como el de una casa. de sol a sol, nunca se acaba. Para vosotros como para los hombres de campo, no debe haber relojes ni calendarios. Ante vosotros solo debe actuar el sol, los días y las noches, el frío o el calor, la sequía o la venida de las aguas y los vientos. Al igual que el hombre de campo, debéis siempre mirar hacia arriba en busca del cambio del tiempo, o bien hacia abajo viendo crecer la otoñada,… pensando en las yeguas y sus rastras. Imitad a los jinetes de otros tiempos, que supieron hacer de su vida una forma, un estilo, una vocación y un sentido, al mismo tiempo que una profesión.
   No teníamos casi nada, pero nos sentíamos amos del campo, dueños de los mejores caballos y orgullosos de nuestra Unidad y de nuestros hierros: Yeguada Militar  y Sementales del Estado.
… Y en este punto de escritura, quiero hacer un toque de homenaje y admiración a tantos y tantos hombres que nos supieron legar una tradición y una forma de vivir. A esos hombres de una vida sencilla, ¡Como tiene que ser! que, madrugón tras madrugón, montados sobre sus sillas, lloviendo, con frío o calor, se entregaban a su labor, dejándose la vida, con los hígados hechos polvo y quebrado el riñón.
A esos hombres silenciosos, parcos en palabras… solo las justas, hombres que solo subían la voz cuando, a caballo, se enfrentaban con una adversidad, pero que, si habían de quitarse el sombrero a la hora de ver un caballo en el prójimo mejor que el suyo se lo quitaban, porque así se lo habían enseñado.
A todos ellos, los vivos y los muertos, yo que tuve la suerte de rozarlos, hoy con gran respeto y admiración los recuerdo. A mi también Dios me concedió la inmensa felicidad de pasar una buena parte de mi vida muy unido al caballo. He vivido bastante gracias a él, teniéndolo a mi lado, montándolo de continuo, procurando conocerlo a fondo y también que él a mí me conociera, y os confieso que esto no lo cambio por nada.
Que esta confesión sirva de colofón a mis años de mando, que pasaron como galopada en campo abierto, y en los que fui tan feliz como cuando montaba a mi maravillosa “Cantabria” (6). Y prometo que nunca jamás volveré a hablar de mis cosas..., pero como dijo el cínico de Romanones, aquí como en política: “Cuando se dice nunca jamás, se quiere decir hasta esta tarde”.


NOTAS

   (1) “Absentismo”. Traslado de la Unidad y cambio de nombre que llevamos a cabo el 15 de mayo de 1990. Del 5º Depósito de Sementales, ubicado en un viejo caserón de la céntrica calle Asalto, al moderno CRE de Torre Abejar, finca de 32 hectáreas en el término municipal de Garrapinillos, en pleno campo a las afueras de Zaragoza.

   (2) “Barón”. Basado en las dificultades que ofrecía la vieja clasificación de razas efectuada por Sansón, Barón creó el nuevo sistema que abarca todas las variaciones probables y catalogó a los équidos basados en el Aloidismo y bajo el estudio de la plástica – Variaciones morfológicas, perfil, peso y proporciones: Trígamo Signaléptico – Tabla de tres entradas.

  (3)Un año más nos reuníamos en la  tradicional comida que precedía al comienzo de la temporada de monta, comida de paradas que para algunos puede que fuese como compensación a las malas condiciones de vida que se pudieran encontrar por esos pueblos de Dios. Eran como carnaval que antecede a toda cuaresma, pero que yo prefería llamarla de hermandad.
    También  celebrábamos la tradicional comida navideña, a mediados de diciembre, a caballo entre los turnos de permiso, siendo su principal fin el felicitarnos y desearnos todo lo mejor para el próximo año que al galope se nos venía encima

  (4)Por resolución  del Secretario de Estado de la administración militar, se nos comunico en escrito núm. 460/065 de fecha 21 de enero de 1994 que a nuestra Unidad se integraban las siguientes con todo su personal: C.R.E. de Bétera (Valencia), C.R.E. de Hospitales de Llobregat (Barcelona) y el C.R.E. de Manacor (Mallorca).

  (5)El entonces General Jefe de la Brigada de Caballería “Castillejos II” Excmo. Señor D. José García Benavides y posteriormente General Jefe de los Servicios de Cría Caballar y Remonta, hijo del medalla de oro de la Olimpiada de Ámsterdam, el entonces Cáp. D. Julio García Fernández  Siempre decía:“conmigo tengo dos tipos de subordinados: los profesionales ,...y los aficionados”


   (6) “Cantabria”.- Mi último caballo después de 30 años como jinete en activo 1966-1996. Origen:     Yeguada Militar de Ibio por  “Aligote” y “Vandee”, yegua alazana ganadora de “algunas”  pruebas pequeñas.

BIBLIOGRAFÍA

“El Noble Bruto y sus Amigos”                                  Adolfo Botín Polanco.
“El Caballo en España”                                                José María Pemán (Introducción).
“El Gran Libro del Caballo”                                         H.H. Isenbart – E.M Büher.
“El Picadero Real”                                                          Pluvinel. Álvaro Domecq y Díez (Prologo).
“Estampa de Capitanes”                                             Jorge Vigón.
“Caballo Español, Caballo de Reyes”                     Juan Llamas Perdigó.
“El Caballo Rey”                                                              Monique y Hans D. Dossenbach.
“Hickman´s Farreyevy”                                                Hickman – Humprey.
“Este es el Caballo Español”                                      Juan Llamas Perdigó.
“Doma Vaquera”                                                           Luis Ramos Paúl.

Ángel Cerdido Peñalver
Zaragoza mayo 2015



Viewing all articles
Browse latest Browse all 1469

Trending Articles



<script src="https://jsc.adskeeper.com/r/s/rssing.com.1596347.js" async> </script>